Pero no sé de dónde volví a encontrar la energía PARA CONTINUAR! Seguramente de la curiosidad, que es muy insistente. Así que... ¡manos, pies y muchas tardes a la obra!
Prooooceso:
1º Lo amarré por todos lados para evitar que se encabritara; necesitaba salvar ese centímetro de distancia entre ambas partes (fruto de la resina de poliéster al encogerse!)
3º Lo puse en pie y: ¡se sostenía! Improvisé una base con lo que tenía a mano (que pesara lo suficiente para mantenerlo erguido), y le pegué cuernos y brazos. Ninguno encajaba con nada pero compré un Súper Pegamento y después volví a salvar las juntas con máaaaaaas resina.
Catastrófica junta de unión del brazo. |
No sé por qué pero a mí me gusta pintar las esculturas, quizá porque se pone en plena actividad la sensibilidad pictórica con la volumétrica; y me lo pasé genial ese ratito. Sabía que no quería darle una pátina completa, y que la base debía integrarse de alguna manera pero... no tenía ni idea de cómo iba a hacerlo. Al final, el mismo proceso te guía dándole un sentido a lo que estás haciendo.
De negro estaba súper monstruoso pero todavía le quedaba recorrído de calidades y texturas.
Aplicación de pigmentos color tierra y amarillos, acrílico verde para algunas zonas y mucho aguarrás para sacar la sensación de Monstruo!
Al final la base acabó siendo un popurrí de todo lo que le cayó encima.
Y este... es el bendito resultado final:
Cave monstrum, ¡que muerde!
Y esto que yo pensaba que era pequeño cuanto mide!? Jajaja
ResponderEliminarMe encanta!!!!
Acushla
Pues medirá unos 60 cm, un poco más quizá. Y pesa un quintal! Hoy me lo llevo a casa :S Verás tú el dolor de cuello con el que acabo.
EliminarUn besito wapa!
Acushla